¿Por qué se celebra el Primero de Mayo?


Una bomba estalla en la manifestación de la plaza Haymarket

¿Por qué se celebra el Primero de Mayo? Respondiendo concisamente, por conmemorarse la efeméride de una huelga en Chicago que dio lugar a unas cuantas condenas a muerte.

En el año 1886, llenaban las fábricas estadounidenses proletarios que podían llegar a tener jornadas de dieciocho horas diarias. Los niños y las mujeres trabajaban lo mismo, aunque cobraran menos. Seis años antes, en 1880, se legalizaron los sindicatos y se reconoció el derecho de reunión y asociación de los grupos obreros, lo que incrementó su popularidad. En este contexto, el 1 de mayo vio nacer una huelga que paralizó más de 12.000 fábricas en todo el país. El día 3, 80.000 huelguistas se manifestaban sólo en Chicago, y el diario Arbeiter Zeitung publicaba:

La sangre se ha vertido. Ocurrió lo que tenía que ocurrir. La milicia no ha estado entrenándose en vano. A lo largo de la historia el origen de la propiedad privada ha sido la violencia. La guerra de clases ha llegado.... En la pobre choza, mujeres y niños cubiertos de retazos lloran por marido y padre. En el palacio hacen brindis, con copas llenas de vino costoso, por la felicidad de los bandidos sangrientos del orden público. Séquense las lágrimas, pobres y condenados: anímense esclavos y tumben el sistema de latrocinio.

El 4 de mayo, según se había planeado, se dieron reuniones nocturnas en distintos puntos de la ciudad. Una de ellas, en la plaza Haymarket, reunió a 3000 hombres. Pero comenzó a llover, y la manifestación se disolvió. Cuando sólo quedaban unas doscientas personas, un destacamento de 180 policías armados ordenó dispersarse, y una bomba explotó cerca de allí. Haymarket se convirtió en un terreno de combate, y las farmacias del barrio se convirtieron en improvisados hospitales donde se apiñaron los heridos; murieron siete agentes, la mayoría por balas de sus propios compañeros.

El gobierno declaró la ley marcial, y manifestantes de todos los estados fueron asesinados por incumplirla. Poco después, se detuvo a ocho anarquistas de una asociación llamada IWPA. Su juicio, totalmente manipulado, se convirtió en un linchamiento. El fiscal Grinnel aseguró: "La ley está en juicio. La anarquía está en juicio. El gran jurado ha escogido y acusado a estos hombres porque fueron los líderes. No son más culpables que los miles que los siguieron. Señores del jurado, condenen a estos hombres, denles un castigo ejemplar, ahórquenlos y salven nuestras instituciones, nuestra sociedad". Siete de ellos fueron condenados a muerte aunque, gracias a los actos de protesta en todo el mundo, dos fueron indultados justo antes de la ejecución. Otro, Louis Lingg, se suicidó en su celda. El "viernes negro" del 11 de noviembre de 1887, los cuatro restantes fueron ahorcados después de entonar La Marsellesa Anarquista. José Martí, corresponsal argentino del periódico La nación, relató:

Salen de sus celdas. Se dan la mano, sonríen. Les leen la sentencia, les sujetan las manos por la espalda con esposas, les ciñen los brazos al cuerpo con una faja de cuero y les ponen una mortaja blanca como la túnica de los catecúmenos cristianos. Abajo está la concurrencia, sentada en hilera de sillas delante del cadalso como en un teatro... Firmeza en el rostro de Fischer, plegaria en el de Spies, orgullo en el del Parsons, Engel hace un chiste a propósito de su capucha, Spies grita: "la voz que vais a sofocar será más poderosa en el futuro que cuantas palabras pudiera yo decir ahora». Les bajan las capuchas, luego una seña, un ruido, la trampa cede, los cuatro cuerpos caen y se balancean en una danza espantable.

Trece años después, en 1890, fue proclamado el Día Internacional de los Trabajadores, aquél que hoy nos brinda veinticuatro horas de descanso en nuestras tareas.

1 comentarios:

  1. Gracias por la informacion me a sido de gran ayuda aunque uviera preferido que estuviera mas detallada pero es muy util para el proyecto que estoy realizando.

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